El panel 5K del iMac
Acaba de salir un nuevo modelo de iMac de 27" y una definición monstruosa que llega a los 5K. Cada vez, más fabricantes optan por paneles de altísimas resoluciones y precios desorbitados. Ya se empiezan a ver TVs 4K a precios razonables e incluso Amazon ha actualizado el Kindle con una densidad de 300ppi.
En este contexto, hay que plantearse la utilidad de todo esto y la repercusión que tiene en el precio. Para ello hay que tener en cuenta que un sistema informático es tan potente como el componente inferior. Como una cadena, que es tan fuerte como su eslabón más débil. En el caso de pantallas, el componente inferior son nuestros ojos. Hay que reconocer que nuestros ojos son imperfectos. Afortunadamente, esto permite que con tan solo 24fps, tengamos la sensación de continuidad y movimiento en imágenes estáticas.
Steve Jobs introdujo el concepto de retina display. Un panel cuyos pixels son tan pequeños que no pueden distinguirse entre sí. Es necesario conocer el umbral a partir del cual empezamos a considerar una pantalla como retina. Y este límite no es estático, ya que depende de la distancia. En realidad, todas las pantallas son retina a partir de una distancia determinada que es lo que interesa calcular. Hay una calculadora específica pero no expone su metodología, así que me he puesto a investigar un poco sobre este tema.
Richard Gaywood plantea una ecuación genérica pero no va más allá.
Me he tomado la molestia de desarrollar, despejar, simplificar, aproximar y ajustar las unidades para llegar a la siguiente fórmula:
Donde d es la diagonal, h y w son respectivamente el alto y ancho de la pantalla. Esta fórmula es bastante más útil y sencilla aunque es bastante fea pero así se consigue introducir datos en pixels y pulgadas y que devuelva el resultado en centímetros.
Con esta fórmula se puede calcular la distancia de retina de cualquier pantalla. Por ejemplo, una TV Full HD 40" es retina a partir de 1.6m por lo que pantallas 4K me parecen innecesarias en prácticamente cualquier situación. Por el contrario, el monitor del antiguo iMac de 27" es retina a partir de 80cm, una distancia algo más alejada de lo que se considera correcto. Es cierto que un iMac no necesita 5K para llegar a ser retina pero los productores de vídeos en 4K se beneficiarán de esto al poder visualizar las grabaciones a tamaño completo, en resolución nativa y todavía les quedará sitio en pantalla.
En resumen, las TVs 4K son innecesarias, pero los monitores de ordenador 5K tienen, al menos, cierta justificación teórica.
Hay que tener en cuenta que los cálculos se han realizado bajo la hipótesis de que una persona con visión normal no puede distinguir dos líneas separadas por un espacio que forme un ángulo menor a un minuto. Aunque esto es discutible, yo no soy óptico y parece ser la medida comúnmente aceptada.